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Para muchas personas, las tormentas eléctricas en Guayaquil pueden suponer un poco de incertidumbre a la hora de viajar por vía aérea. ¿Es seguro volar en esas condiciones?, ¿cuáles son los efectos de las tempestades en los recorridos?, ¿existen medidas preventivas? Son algunas de las preguntas más frecuentes.
En la actualidad, todavía hay mucha desinformación al respecto. Por ello, hoy le traemos esta pequeña guía de preguntas y respuestas acerca de las tormentas eléctricas y la aviación. Despejaremos sus dudas sobre los protocolos de seguridad ante estas eventualidades y le adelantamos: sí, es seguro volar cuando hay una tormenta eléctrica.
Las tormentas eléctricas en Guayaquil son comunes en esta temporada. Sin embargo, ¿por qué en este año se ha presentado una mayor cantidad de precipitaciones con rayos? De acuerdo al Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), esto es producto de la fuerte inestabilidad atmosférica y del incremento de la temperatura de la superficie del mar.
Especialistas del Inamhi han explicado que desde finales de febrero e inicios de marzo se ha observado que en el mar territorial ecuatoriano y peruano hay un rápido calentamiento de la superficie del mar. Por ello, en marzo se registraron 23 temporales y gran parte de ellas han sido tormentas eléctricas.
Todo esto se debe a la combinación de dos factores: un sistema natural que involucra la convergencia de diferentes corrientes de aire y, el viento que ayuda a llevar las nubes. Juntos, han provocado un aumento en la cantidad de lluvias.
Las tormentas eléctricas pueden tener varios efectos en el vuelo de un avión, dependiendo de la intensidad y la duración de la tormenta, así como de las características del avión. Algunos de los efectos más comunes incluyen:
La industria aeronáutica opera las 24 horas del día, los 365 días del año, sin importar los cambios y condiciones climáticas. En ocasiones, cuando el clima es severo, puede provocar algunos inconvenientes en los operadores aéreos, aeropuertos y pasajeros, pero no hay medio de transporte más seguro que el aéreo.
Así, por ejemplo, si un rayo golpea un avión, generalmente no causa daños porque el avión actúa como una jaula protectora de Faraday (caja metálica protectora de los campos eléctricos estáticos, en su interior el campo eléctrico es nulo y se utiliza en la protección de descargas eléctricas).
No hay regulaciones específicas para aeropuertos o aerolíneas, para seguir en caso de alerta de rayos. De acuerdo a la industria (aeropuertos), algunas de las mejores prácticas incluyen:
(1) Emitir una alerta meteorológica a las operaciones cuando la tormenta se encuentre a 8 millas del centro del aeropuerto,
(2) Suspender las operaciones de rampa y abastecimiento de combustible a las 5 millas.
(3) Reanudar las operaciones después de que la tormenta despeje el radio de 5 millas del aeropuerto.
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) dice que se emitan alertas de rayos a las 5 millas (8 km) y se detengan las operaciones a las 3 millas (5 km). Sugieren usar un radio crítico de 3 millas y reanudar las operaciones una vez que la actividad de los rayos se haya movido más allá de este radio.
Alternativamente, esperar hasta que un rayo caiga al suelo o alguien escuche un trueno cerca, pone a todos en mayor riesgo.
Los rayos son un peligro, especialmente en los aeropuertos. Si bien los rayos generalmente no son una amenaza para las aeronaves, el medio ambiente abierto, las torres, los edificios y las antenas crean un entorno propenso al impacto de rayos que puede ser peligroso para el personal de soporte en tierra, el personal de servicio e incluso los pasajeros.
Esta es una preocupación mayor para la industria de la aviación, especialmente para el personal de asistencia en tierra en el área de plataforma. Los rayos pueden afectar las operaciones del aeropuerto sin importar dónde despeguen o aterricen sus vuelos, y los retrasos relacionados con el clima, causan un efecto dominó en el tráfico aéreo.
En general, los pilotos están capacitados para manejar situaciones de tormenta eléctrica y tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los pasajeros y la tripulación. De la misma forma, para minimizar los efectos de la caída de rayos en la plataforma de un aeropuerto, se utilizan sistemas de protección contra rayos en los edificios y estructuras cercanas.
También están establecidos protocolos de seguridad para el personal de tierra del aeropuerto durante las tormentas eléctricas. Además, los aviones modernos están diseñados para resistir los efectos de los rayos y tienen sistemas de protección integrados para minimizar los daños en caso de impacto.
Sin duda, a pesar de las tormentas eléctricas en Guayaquil, es seguro viajar en avión. Le recomendamos revisar con antelación el estado de su vuelo y seguir las indicaciones del personal especializado, para garantizar la comodidad y calidad de su viaje.
FUENTE: Dirección General de Aviación Civil y Diario El Universo.
Aeropuerto José Joaquín de Olmedo Edificio Administrativo, 1er Piso.
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